Capítulo 59: Eugene se reúne con su madre.

“Uhm… ¿realmente eres mi madre…?” (Eugene)

De alguna forma me logré calmar y pregunté esto.

“Eso es correcto, Eugene.”

La Angel-sama (mi madre) respondió con una sonrisa.

Ella me llega al pecho de altura.

Bastante pequeña.

Parece tener de 12-13 años.

La longitud de sus brazos no es diferente a la de un niño.

Hermoso cabello dorado tenue que no le llega a los hombros.

Hay 2 grandes ojos naranjas en su cara infantil[1].

Y, aun así, tenía un maná y aura que volvía difícil el respirar.

Ella es una existencia increíblemente desbalanceada.

Hay una montaña de cosas que quiero preguntar, pero lo que más me molestaba era…

“Luces completamente diferente a la apariencia que papá me dijo que tenías…”

El retrato de mi madre que decora la casa y fue dibujado con magia de grabación daba un aire más maduro y aparentaba ser una dama con largo cabello negro.

“Aah, eso. Los ángeles tienen cuerpos espirituales para que puedan actuar en el plano mortal con esta apariencia. Conocí a Ju-kun con mi cuerpo artificial usado con propósitos de investigación en el plano mortal.”

“… ¿C-Cuerpo Artificial?” (Eugene)

“Bueno, digamos que es como una muñeca muy elaborada. La diferencia entre eso y los humanos es menor a 0.00001%, así que es prácticamente humana, ¿sabes?”

“…Ya veo.” (Eugene)

Realmente no lo entiendo, pero eso aparentemente significa que el dibujo en el retrato era la forma temporal de mi madre y que este ángel es su verdadera forma.

En ese caso, la siguiente pregunta surge.

“¿Por qué viniste al plano mortal en primer lugar cuando eras un ángel?” (Eugene)

Ella fue tan lejos como para crear una muñeca similar a una humano.

“Fuh… ¡Buena pregunta, Eugene! Los ángeles tenemos que hacer extraños trabajos para las Diosas día a día, y mantener un ojo en el plano mortal. Eso en sí mismo es un trabajo fructífero, pero… ¡Ilia-sama se apiadó y les dijo a los ángeles esto! ‘¿Hay alguien que quiera ir al plano mortal?’, ¡ya ves!”

“¿Así que quien aceptó su oferta fuiste tú, madre?” (Eugene)

“¡Eso es correcto! No hay otra forma de que un ángel descienda al reino mortal además de convertirse en un ángel caído, así que ser capaz de venir al plano mortal libremente era como un sueño hecho realidad…”

Mamá se quedó mirando al vacío como si recordara.

“Y fue un suceso desafortunado que aterrizaras en el Continente Este que siempre está teniendo guerras.” (Jubei)

Papá dijo esto.

“¿De qué hablas? Así es como te conocí, Ju-kun.”

El nombre de papá es Jubei, así que su apodo es Ju-kun, huh.

Aunque esta es la primera vez que escucho a alguien llamarlo así.

“Bueno, logré conocer a Laila gracias a eso, así que tengo que ser agradecido con la Diosa del Destino.” (Jubei)

“Caramba~, ¡actuando tan genial de repente! Solo debido a que estás frente a Eugene. Puedes dejar que te mime como siempre.” (Laila)

“¡O-Oi! Te estás acercando demasiado a mí. Eugene está observando.” (Jubei)

“¿No está bien? Que los padres se lleven bien es algo bueno.” (Laila)

(Ooh…papá está avergonzado.) (Eugene)

Siempre ignoró a todas las mujeres que se le acercaron en el Imperio.

Él le ha sido leal a mi madre todo el tiempo. Solo pensar en eso me hace feliz.

Pero…

(Un hombre que tiene más de 40 y una chica que parece tener 12 están coqueteando…) (Eugene) (Nero: loli legal)

No sé por qué…pero parece ilegal. O más bien, esto realmente parecería ilegal en el Imperio donde eres considerado un adulto a partir de los 15.

Y entonces, una pregunta surgió cuando escuché la conversación.

“¿Veías a mi madre seguido, papá? Podrías habérmelo dicho.” (Eugene)

Dije esto aparentando estar de mal humor.

En realidad, estoy un poco triste de ser el único que no lo sabía.

La expresión de ambos se nubló antes mis palabras.

“En serio lamento eso. Pero de acuerdo con tu madre, aparentemente están las Regulaciones del Reino Divino, así que no podían permitir que un mortal viera a un ángel incluso si eran progenitor e hijo.” (Jubei)

“Lamento haberte hecho sentir solo, Eugene… Realmente quería reunirme contigo todo el tiempo, pero incluso con Ju-kun, solo podía verlo una vez al año…” (Laila)

“Una vez al año… Es así.” (Eugene)

Una pareja que solo puede verse una vez al año debe tenerlo difícil.

Por supuesto que querrían hablar sin que nadie se interpusiera.

Allí fue cuando la cara de mi madre se iluminó.

“Pero sabes, Eugene, ¡las Diosas del Reino Divino vieron tus logros esta vez! Te estaban elogiando~. Ellas se alegraron cuando les dije que eras el hijo del que estaba orgullosa. ¡Así que ahora puedo reunirme contigo!” (Laila)

“¡¿Las diosas?!” (Eugene)

Me sorprendí por lo que dijo mi madre.

“¡Derrotaste a Cerbero-kun después de todo! Se ha convertido en la plática del Reino Divino también.” (Laila)

“¿Yo soy el tema de conversación del Reino Divino…?” (Eugene)

Es algo tan grande que simplemente no me cuadra.

Las diosas elogiándome…

“Pero…hay algo por lo que tengo que disculparme contigo, Eugene.” (Laila)

La cara de mi madre se volvió una triste.

“¿Q-Qué ocurre tan de repente?” (Eugene)

La cara de mi madre cambia continuamente.

“Es sobre tu constitución.” (Jubei)

“¿Constitución…? ¿El hecho de que solo tenga maná blando?” (Eugene)

Le pregunté de vuelta a papá.

“Sí, sobre eso… Probablemente la heredaste de mí. El maná de los ángeles tiene la limitación de que no puede herir a los demás. Esa es la razón de que, cuando combates a un enemigo, es necesario usar armas exclusivas para ángeles. En mi caso, sería esta.” (Laila)

Una lanza blanca apareció en el aire.

Una simple espada sin ornamentos.

Pero sentí más maná de ella que de la Espada Sagrada que Sara tiene.

“Espera, ¿incluso aunque estuvieras en el cuerpo artificial que era prácticamente idéntico al de un humano cuando me diste a luz?” (Eugene)

¿No sería raro heredar la constitución de un ángel así?

“Eso es lo que yo también pensé, pero…parece que efectivamente has heredado el maná de tu madre que es un ángel…” (Jubei)

“Perdón por eso, Eugene… Casi no hay precedentes de humanos y ángeles que hayan tenido hijos, así que me tomó tiempo dar con la razón.” (Laila)

Papá y mi madre bajaron sus cabezas y se disculparon.

“Está bien, no me molesta.” (Eugene)

Si hubiera sido hace 2 años…hubiera estado de un humor mucho peor sobre esto.

Pero gracias a esta constitución, terminé yendo a la Academia de Magia Lykeion, conocí a Sara, y decidí apuntar a la Zenith Tower con Sumire.

Puede que no haya sido capaz de convertirme en un espadachín mágico que sea igual a papá en el Imperio, pero no odio a mi yo actual.

“Gracias…por convertirte en un hijo maravilloso.” (Laila)

“Realmente tienes que estar fuera de ti misma. La cara de Eugene es ahora la de un hombre.” (Jubei)

Mi madre nos abrazó a papá y a mí y despeinó mi cabello.

Me están tratando completamente como un niño aquí.

Aunque no es como si lo odie.

En ese momento, la expresión de mi madre se volvió seria.

“¿Madre?” (Eugene)

“¿Hmm?” (Laila)

Ella movió su nariz cerca de mi cuerpo como si fuera un sabueso.

“¿Hm? Hey, Eugene, tu cuerpo tiene el olor de un ángel diferente en él…” (Laila)

“¿Eh?” (Eugene)

Me estremecí.

Lo que vino a mi mente fue el nombre de cierto Ángel Caído.

Pero dio el nombre de un ángel diferente.

“Uhm… ¿tal vez sea el ángel del 100° Piso, Rita-san?” (Eugene)

“Ooh, ¿has conocido a otros ángeles además de tu madre, Eugene? Esa es la Última Mazmorra para ti.” (Jubei)

Papá dio una reacción sorprendida, pero la cara de mi madre aún era seria.

“No…es diferente a la de la nueva ángel Rita-chan. Es más como de un ángel veterano… Probablemente de la misma edad que yo o más joven…” (Laila)

“Aah, me descubrieron, huh. Ha pasado un tiempo, Laila-senpai~.”

La voz resonó en la pequeña iglesia.

Esta voz es…

“¿Eri?” (Eugene)

“Tú… ¡¿podrías ser Erinyes?!” (Laila)

Mi voz y la de mi madre se sobrepusieron.

“Hey, Eugene, ¿puede que esta sea la Señor Demonio a la que te enfrentaste en el 100° Piso?” (Jubei)

“S-Sí…eso es correcto.” (Eugene)

“Hoh, me imaginaba una voz más aterradora.” (Jubei)

Papá dio una opinión descuidada.

“Pero ¿por qué resuena aquí la voz de Eri?” (Eugene)

“Sentí la presencia de Laila-senpai descendiendo, así que pensaba en quizás saludarla como su kouhai.” (Eri)

“¿K-Kouhai?” (Eugene)

“Ella era una kouhai mía durante la escuela de ángeles. Yo era un ángel de investigación y vigilancia, y Eri estaba a cargo de las batallas, así que fuimos al Infierno a investigar un par de veces… ¡Pensar que terminaría cayendo! ¡¿No te sientes mal por las diosas?!” (Laila)

Mi madre gritó.

O más bien, ¿hay una escuela de ángeles?

No lo sabía.

“Debido a que la Diosa de la Madera Freya era demasiado egoísta. No puedo pasar toda mi vida en un lugar como ese.” (Eri)

“Bueno… Freya-sama tiene una personalidad un poco problemática…” (Laila)

“Hablando de eso, ¿sigues con la Diosa del Agua, Eir-sama?” (Eri)

“Me movieron. Además, no había trabajo donde la Diosa del Agua y no tenía nada que hacer. Eir-sama casi nunca nos da trabajo después de todo.” (Laila)

“Tener un puesto donde puedas tomarlo con calma es bueno. No hubiera caído si hubiera estado allí.” (Eri)

“O más bien, vuelve ya al Reino Divino. ¿No has pagado por tus pecados tras haber sido sellada por 1,000 años?” (Laila)

“El reino mortal es tan cómodo, así que me quedaré aquí por un rato~.” (Eri)

“…Tú…los ángeles jóvenes van a imitarte, así que detente.” (Laila)

Una charla casual se estaba desarrollando ahí.

Parece que mi madre y Eri eran viejas amigas.

Papá decía ‘Laila realmente es impresionante~. Incluso ha conocido a Diosas y Señores Demonio, huh~”. Él parece estar realmente impresionado.

Pero me preocupa que Eri pueda decir algo innecesario.

Lo terrible es que la conversación se movió hacia allí.

“Hablando de eso, ¿por qué siento tu esencia en el cuerpo de Eugene? No terminaría así por solo enfrentarte en la Prueba del 100° Piso. ¡No pusiste una rara maldición sobre Eugene ni nada, ¿cierto?!” (Laila)

“No haría nada como eso, Laila-senpai. Bueno, una vez a la semana, Eugene y yo—” (Eri)

Rápidamente intervine.

“¡Madre! Eri está confinada en la 7° Prisión Sellada de la Academia de Magia Lykeion. Voy a revisar su estado como miembro del club de animales en la Academia y le doy comida de vez en cuando, así que el miasma puede haberse quedado en mí.” (Eugene)

Le di la explicación más plausible.

No estoy mintiendo.

“Hmm, ¿en serio? ¿Eri no te ha hecho nada raro?” (Laila)

“E-Está bien, te lo diría.” (Eugene)

En realidad, hemos formado un Contrato de Cuerpo…o más bien, estamos en una relación bastante indecente, pero sentía que no era lo correcto contarle esto a mi madre y a papá.

O más bien, me gustaría mantenerlo en secreto de ser posible.

No puedo decirles que mi virginidad fue robada por Eri.

“Bueno, si Eugene lo dice…” (Laila)

Parece que mi madre fue convencida.

“Llamas Eri a la Señor Demonio, Eugene. ¿Eres cercano a ella?” (Jubei)

Mi papá cabeza hueca murmuró esto como si nada.

“… ¿Hm? Hablando de eso, los únicos que la llamaban Eri eran las Diosas o personas a las que fuera realmente cercana…” (Laila)

¡Esto es malo!

Mi madre está sospechando de nuevo.

Estaba dudando sobre si engañarlos o qué, pero…

“Aah, la magia de transmisión está a punto de cortarse. Nos vemos, disfruten de su tiempo en familia~.” (Eri)

Diciendo esto, ya no pude oír más la voz de Eri.

“Esa chica es la misma de siempre…” (Laila)

Mi madre suspiró pesadamente.

“Parece que te estás divirtiendo en la Academia, Eugene.” (Jubei)

Parece que papá no sospecha nada.

Me alegra que se tan descuidado.

La cara de papá se volvió seria.

“Eugene.” (Jubei)

“¿Qué?” (Eugene)

“Este es el tema principal…” (Jubei)

El tono de la voz de papá cambió.

“¿Tema principal?” (Eugene)

Vinimos a ver a mi madre, ¿cierto?

¿Teníamos otro asunto que tratar?

Pero parece que tenía sentido para mi madre.

“Aah, lo vi desde el Reino Divino, así que quería decirlo también… Debe ser acerca de eso, ¿cierto? Solo quedan unos cuantos días.” (Laila)

Escuché esas palabras.

“Eugene, esta es información clasificada, así que mantenlo entre nosotros… El resellado de la Gran Bestia Demoniaca Haagenti probablemente…fallará.” (Jubei)

Papá me dijo esta realidad con un pesado tono de voz.

 

■Respuesta a Comentarios (Del Autor):

>¿Un hijo entre un humano y un ángel? Eso si quiera es humano, lol.

>Papá estaba llorando, lol.

-Prácticamente humano si hablamos de cuerpo.

 

>Medio ángel…

>Por supuesto que estaría especializado en defensa.

-El misterio sobre el cero poder de ataque ha sido resuelto.

 

■Comentario del Autor:

La madre es el elemento ‘loli’ de esta historia (solo en apariencia).

Pensé en hacerla la compañera de clase de Eri, pero no creo que sea buena idea una heroína de la misma edad que la madre. Y así, hice a Eri la kouhai de Laila.

 



[1] Lo cambiaron de azul a naranja, o puede haber sido la perspectiva de Eugene.

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