Hikawa-sensei Wants an Otaku Boyfriend Volumen 3

Capítulo 9

Capítulo 9

“…Por favor, cálmate y vuelve a explicarlo”.

La sala de preparación al aire libre estaba sumida en un caos absoluto.

La posibilidad de que Hoshimiya Shiho-san no llegará a tiempo había causado una gran conmoción. Incluso Tojo-senpai estaba completamente paralizada, con la boca ligeramente abierta.

Si fuera por mí, también habría entrado en pánico, pero era curioso, al ver a todos tan nerviosos, mi mente se aclaró de forma natural.

“¿Podrías explicarnos cómo sucedió esto? ¿Y por qué están solicitando la cancelación?”.

Entendía que quedaran atrapados en el tráfico y que llegarían tarde. Sin embargo, no comprendía por qué estaban pidiendo cancelar la presentación.

Haciendo un esfuerzo por mantener un tono calmado, le pregunté a Shimizu-san, quien movió sus labios pálidos.

“E-E-Es que…parece que ya habían aceptado venir dentro de un horario ajustado. Y, por lo visto desde el comité organizador de Keika acordaron que, si surgía un imprevisto podrían priorizar darnos por alto y seguir con su siguiente compromiso…”.

Eso era algo que nunca habíamos oído, ni mucho menos aceptado.

Cuando hablé con Aosaki-san al principio, no parecía que las cosas estuvieran en esta situación.

Por lo tanto, quedaba claro quién había hecho esa promesa.

Las miradas se desplazaron rápidamente, fijándose en un hombre que acababa de entrar al camerino, comiendo despreocupadamente una salchicha.

En otras palabras, Shigeno-san.

“¿Eh? ¿Todos? ¿Q-Qué pasa?”.

Quizá noto el ambiente tenso, pues incluso Shigeno-san, mostró signos de nerviosismo mientras preguntaba.

Tojo-senpai fue quien le explicó la situación.

“Shiho Hoshimiya-san quedó atrapada en el tráfico mientras viajaba en taxi, y parece que va a llegar tarde. Además, nos han informado que, dado que ya aceptó venir en un horario ajustado, está solicitando que se cancele la presentación, de acuerdo con un supuesto acuerdo previo”.

“¿Ca-Cancelar?”.

“Así es. Sin embargo, nosotros no hemos escuchado nada sobre un acuerdo previo. ¿Sabes algo al respecto?”.

“Eh, eh…¿cómo decirlo…? ¿De qué estaba hablando…? Pues…”.

Claramente incómodo, Shigeno-san apartó la mirada de forma sospechosa.

Esa actitud era más que suficiente para confirmar las sospechas de todos.

Siguiente el ejemplo de Tojo-senpai, también decidí preguntarle.

“Shigeno-san, si sabes algo, por favor, dilo”.

“¿Eh? ¿Me estás acusando? ¡Te dije que no sé nada!”.

“Disculpe, entonces, le preguntaré a Aosaki-san directamente en ese caso”.

“¡Espera un momento!”.

Justo cuando sacaba mi teléfono, Shigeno-san levantó la voz, claramente nervioso.

“No, no hables con Aosaki-san, espera”.

“¿Por qué?”.

“Eh, pues…ahora que lo pienso, puede que si…tal vez, hice esa promesa”.

En el momento en que Shigeno-san pronunció esas palabras, el camerino se quedó completamente en silencio.

Nadie decía nada.

“…”.

Sin embargo, aunque no se escuchara nada, era fácil intuir lo que todos estaban pensando.

“¿Entonces, fue Aosaki-san quien aceptó esos términos?”.

Shigeno-san evitó mirarme y no respondió.

Ya no había alternativa.

“Oye, Kirishima, ¡te dije que no llamaras a Aosaki-san!”.

Shigeno-san estaba gritando frente a mí, pero no le daba importancia.

Cuando marqué, Aosaki-san contestó tras solo un tono.

“Hola, Aosaki-san. Este…”.

“Estoy al tanto de la situación. Parece que surgió un problema”.

“¿Eh?”.

Nada más comenzar, Aosaki-san abrió la conversación de manera directa.

“Sin embargo, debido al acuerdo acordado, está estipulado que puede cancelarse el día del evento sin problema alguno, será difícil solucionar esto”.

“Eh, respecto a eso…yo no tenía conocimiento de ese acuerdo”.

Cuando lo mencioné con sinceridad, pude escuchar un tono de sorpresa en la voz de Aozaki-san al otro lado del teléfono.

“¿Qué? ¿No sabías…? ¿Esto es en serio?”.

“Si. Lo siento, pero…¿podrías explicarme los detalles?”.

“Eh…Bueno, originalmente nos dieron dos fechas posibles de presentación: el día de ayer y hoy. Pero hoy ya había una grabación programada con antelación. Después de la presentación del festival, también tenían un trabajo reservado tentativamente. Entonces nos preguntaron qué hacer. Pero ese tal Shigeno insistió en que tenía que ser hoy, y…bueno, aceptaron con la condición de que, en el peor de los casos, podría cancelarse si ocurría algún problema”.

“…Gracias. Creo que entiendo más o menos la situación”.

“Ah, no te preocupes…pero, sinceramente, esto es algo lamentable. Así que intentaré ver qué se puede hacer desde mi lado”.

“Sí, muchas gracias”.

Después de expresar mi gratitud, colgué la llamada.

Me giré para ver directamente a Shigeno-san.

De hecho, la conversación de antes estaba en altavoz, así que todos los presentes pudieron escucharla.

Por eso, todos los que estaban en este lugar comprendían perfectamente por qué habíamos llegado a esta situación.

“¡No tenía otra opción! ¡Era lo único que podía hacer!”.

Bajo la presión de todas las miradas, Shigeno-san gritó mientras miraba a su alrededor.

“¡El acto principal del festival de Keika siempre ha sido el segundo día! ¡Se ha hecho cientos de veces, y nunca se ha realizado el primer día! ¡No puedo permitirme ser el primero en romper esa tradición! ¡Nuestra universidad tiene fuertes vínculos intergeneracionales, y el festival de Keika es muy esperado! ¡Si hiciera algo así, ¿pueden imaginar lo que dirían de nosotros?!”.

“…Sin embargo, ¿no podrías haber dicho todo esto antes?”.

“¡Eso habría sido admitir que no podía ni siquiera negociar para mantener el horario establecido!”.

En el momento en que Tojo-senpai intentó intervenir cautelosamente, Shigeno-san perdió la cama y gritó.

Lo que siguió fue un silencio aún más denso.

Todos guardaron silencio, pero sus miradas frías permanecían clavadas en él.

Ante eso, Shigeno-san movía la mirada en todas las direcciones, como buscando ayuda desesperadamente.

“¡A-Al fin y al cabo, nadie podría haber predicho algo así! ¿Verdad? ¡Y, además, ¿quién habría pensado que habría un embotellamiento en primer lugar?!”.

“Es probablemente por los deslizamientos de tierra causados por la lluvia torrencial de ayer”.

Quien respondió tranquilamente fue Tojo-senpai.

En esta área, a pesar de la gran cantidad de tráfico, hay muchas carreteras estrechas. No se sabe exactamente qué caminos se han visto afectados o a qué escala, pero no es raro que algo así ocurra.

Por otro lado, en el momento en que Shigeno-san escuchó la frase “deslizamiento de tierra”, de repente pareció revitalizarse, como un pez dentro del agua.

“¡D-Deslizamiento de tierra! ¡Entonces debería haberse previsto! Ahora que lo pienso, esta tarde alguien estaba hablando sobre eso, ¿no? ¡Deberían haberlo comprobado en ese momento! ¡Y tú, tú! ¿Por qué no lo verificaste?”.

El objetivo al cual estaba apuntando Shigeno-san no era otro que Shimizu-san, quien había asumido sus responsabilidades. 

Shimizu-san palideció aún más.

Ante esto, Tojo-senpai ofreció una explicación adicional.

“Eh, Shigeno-san. Eso no se pudo hacer”.

“¿No se pudo hacer? ¿Por qué no? ¿Acaso no se les ocurrió pensar en algo tan básico como esto…?”.

Tojo-senpai negó lentamente con la cabeza mientras respondía.

“Shimizu-san literalmente no pudo verificarlo. Porque Shimizu-san estaba a cargo de los preparativos de la banda que nos hiciste agregar a último minuto. ¿No es verdad, Shimizu-san?”.

Ante las palabras de Tojo-senpai, Shimizu-san asintió temblando.

Es verdad. En ese momento, Shimizu-san, quien originalmente debía estar disponible para otras tareas, fue asignada a esa labor.

Si esa presentación “sorpresa” no hubiera ocurrido, tal vez podría haber hecho algo.

Al parecer, fue entonces cuando Shigeno-san finalmente entendió quién era la causa de todos los problemas. Con eso, se dejó caer al suelo.

Pero justo cuando parecía rendirse, de repente comenzó a reírse a carcajadas.

“¡Ja,ja,ja! ¡Todo ha terminado!  ¡La presentación estelar del festival se ha ido! ¡Es algo inaudito! ¿Quién se hará responsable por esto?”.

“…¿No fue hace un momento que Shigeno-san dijo que asumiría la responsabilidad?”.

Si mi memoria no me falla, estaba seguro que había dicho eso.

“¡Ja! ¡No digas tonterías! ¡Eso fue solo un desliz! ¡Yo no lo haré! ¡Esto no es algo que cualquiera pueda asumir!”.

Mientras intentaba excusarse, Shigeno-san se detuvo abruptamente y, tras quedarse inmóvil por un momento, se dibujó una sonrisa vil en su rostro.

“Hikawa-sensei”.

“¿Qué?”.

¿Qué demonios está diciendo de repente?

Mientras todos quedamos atónitos, Shigeno-san, con los ojos brillando intensamente como si hubiera encontrado su presa, continuó hablando.

“¡Porque, piénselo! ¡En esta situación, la única que podría asumir la responsabilidad es Hikawa-sensei! ¡Es por culpa de su negligencia! Esa mujer está en el comité ejecutivo para solucionar cosas como esta, ¿verdad?”.

“¡Tch!”.

“¡Ah, desde el principio nunca me cayó bien esa mujer! ¡Siempre interponiéndose en lo que yo hacía! ¡Una profesora que no sabe quedarse en su lugar y se mete donde no la llaman! Pero si esta vez le hacemos asumir la responsabilidad, sería divertido, ¿no? jaja, si, desde el principio esto fue lo que tenía en mente”.

¿Será porque ha estado bebiendo que habla como un completo idiota?

Shigeno-san–no, este tipo–con el rostro completamente enrojecido, está diciendo una sarta de estupideces.

“¡Oigan, apuesto a que no lo saben! Bueno, ¿quizás los de tercer año lo saben? ¡Lo que esa mujer hizo hace tiempo! Es una historia famosa en la universidad. ¡Esa mujer es conocida, para bien o para mal! ¿Quieren que les cuente? ¡Esa mujer tiene ahora mismo una tarjeta amarilla! ¡Y todo fue por arruinar la vida de la hija del presidente del PTA^[1]! ¿Qué creen que pasará si ahora causa otro problema? ¡Con suerte, podría incluso perder su trabajo!”.

Él seguía y seguía vociferando tonterías sin parar, pero después de eso, ya no me importaba.

Shigeno seguía hablando de cosas que yo no sabía acerca de Hikawa-sensei, pero nada de eso me importaba.

Que me insulte o que me quite el mérito, honestamente me daba igual.

Porque por esas razones no fue que empecé con esto.

Pero…pero que hable de Hikawa-sensei.

No puedo permitir que este tipo, que sigue diciendo cosas horribles de Hikawa-sensei, siga hablando.

“–Kirishima, ¿qué pasa? ¿Por qué tienes esa expresión tan aterradora? Oye, ¿estás bien?”.

Antes de darme cuenta, Natsuki estaba de pie junto a mí.

Había venido como miembro del comité del festival para ayudar a resolver esta situación.

Pero no solo eso, Natsuki también presionó suavemente mi puño, que en algún momento había apretado con fuerza.

Cuando levanté la vista sorprendido, todos, incluido Shigeno-san, me estaban mirando.

Había algo en esas miradas que hacía mucho tiempo no veía:

Miedo.

Especialmente en el caso de él, probablemente porque había sentido toda la intensidad de mis emociones dirigidas hacía él, estaba temblando y castañeando los dientes.

En ese momento, me di cuenta de lo que había hecho.

Aunque me arrepentí, ya era demasiado tarde.

Sin embargo, ahora no era momento para lamentarme.

“…Lo siento, Natuski. Gracias”.

Dije eso y me concentré en entender la situación actual.

Mi ira se había calmado. Mis pensamientos estaban claros. Sabía exactamente cuál era el problema.

Y, si ese era el caso, solo había una cosa que tenía que hacer.

“Disculpen, voy a salir un momento”.

“¡E-Espera, Kirishima-kun, ¿a dónde vas?!”.

Tojo-senpai, alarmada me llamó.

Le respondí:

“¡Voy a intentar solucionar esta situación! ¡Por favor, sigan con el plan tal como estaba!”.

“Y, si es posible, hagan que los participantes se demoren lo más que puedan”.

Era simplemente una forma de ganar tiempo.

Aun así, al decir eso, salí corriendo del camerino.

Todavía no sabía que debía hacer.

Aun así, mis pies no se detenían.

Por eso era lo único que podía hacer.

°°°

“…Así que eso es lo que pasó”.

“S-si, así es. ¿Q-Qué hacemos, Hikawa-sensei?”.

Dentro del edificio de la escuela.

Después de recibir la explicación de la situación de parte de los estudiantes del comité, quienes se acercaron a mí apresuradamente, reflexioné sobre ello.

La situación en el peor de los casos, era la peor posible.

Probablemente mi mente estaba tan confundida como la de los estudiantes. Pero, exhalando profundamente y despejando todos mis pensamientos por un momento, les dije que hacer.

“Por ahora, díganles a los invitados que, en la medida de lo posible, intenten llegar aquí. Si consideran que es complicado debido a su próxima agenda, también háganles saber que no hay problema si no pueden asistir al festival. Después de todo, dado que el acuerdo, así lo estipula, no tienen ninguna responsabilidad en esto”.

“¿E-Estará bien asi…?”.

“No lo sé, pero haré algo al respecto. Además, díganles a los que van a participar con un acto en el escenario que ganen algo de tiempo, aunque sea poco. Y ustedes manténganse tranquilos y sigan el plan previsto”.

“¡S-Si, entendido!”.

Con mis indicaciones, los miembros del comité parecían haber recuperado algo de ánimo.

Cuando están en pánico, lo mejor es darles instrucciones claras de lo que pueden hacer, paso a paso. Eso les ayuda a mover su cuerpo y mente.

Sin embargo, esto no es más que posterga lo inevitable.

Al final, nada se está resolviendo realmente.

¿Qué debo hacer? ¿Qué debo hacer? ¿Qué debo hacer?

Esas palabras rondaban en mi mente mientras, inconscientemente, buscaba con la mirada a Kirishima-kun. Pero…

Kirishima-kun no estaba en este lugar.

Probablemente esté en el camerino, dando instrucciones. No sé qué tan acertadas serán, pero estoy segura de que, siendo él, está intentando resolver la situación de alguna manera.

Sin embargo, la razón por la que dejé de buscar a Kirishima-kun fue otra.

En ese momento, estoy mucho más en pánico de lo que podría parecer. Si llegara a encontrarme con Kirishima-kun en este estado, ¿qué sería de mí? No es difícil imaginarlo.

Seguramente, terminaría mostrándole como me siento realmente.

Le mostraría un lado que no quiero que vea de mí.

No serán mis debilidades como “Mashiro Hikawa”, sino las de “Hikawa-sensei”.

Hasta ahora, siempre he tratado a Kirishima-kun como si fuera un niño en mi corazón.

Porque soy su profesora, porque soy una adulta, sentía que debía ser yo quien mantuviera la compostura.

Por ejemplo, cuando Kirishima-kun colapsó debido al cansancio el mes pasado, no sabía qué hacer, mi corazón no dejaba de agitarse de los nervios de saber que algo malo le había pasado.

Pero si mostraba mis debilidades como profesora en ese momento, si le mostraba mis debilidades como adulta, terminaría apoyándome en él.

No sé qué podría hacer él, pero aun así, emocionalmente me volvería completamente dependiente.

Eso equivaldría a que él me alcanzara y que estuviéramos en igualdad de condiciones.

Y algún día, me superaría y me dejaría atrás.

No tengo ninguna prueba de que en verdad eso ocurra, pero mi intuición me dice que eso es lo que pasará.

Por eso, ahora mismo, no puedo ver a Kirishima-kun, no puedo depender de él.

“…Ahhhhh”.

Sin darme cuenta, llegué a la sala de profesores.

Había venido buscando algún profesor de confianza que pudiera ayudarme.

Sin embargo, no había nadie en la sala de profesores.

Por supuesto. Siendo que nos encontrábamos en el festival, es lógico que todos los profesores estuvieran ocupados patrullando o ayudando.

Tengo que contactar a alguien lo más pronto posible. Pensando eso, saqué mi teléfono rápidamente, pero mis manos temblaban tanto que lo dejé caer. Intenté apresuradamente agarrarlo, pero no lograba sujetarlo. Finalmente, de alguna manera logré agarrarlo, pero mis dedos seguían equivocándose a la hora de marcar los números y no lograba desbloquearlo.

Cálmate, cálmate…

Me repetí eso una y otra vez, pero el temblor en mi cuerpo no se detenía.

Por supuesto. Es natural.

Sé que los miembros del comité, mis alumnos de mi grupo, y muchos otros estudiantes y universitarios están involucrados.

Lo sé. También Kirishima-kun, Tojo-san y hasta Shigeno-kun.

Ninguno de ellos actuó con mala intención. Esto sucedió como un imprevisto desafortunado, algo que nunca debió ocurrir.

Y si ellos no son capaces de resolverlo, entonces…

A partir de ese punto, es trabajo de los profesores. Es trabajo de los adultos.

Es mi trabajo hacer lo que se deba hacer.

Por eso, tengo que hacer algo al respecto.

Para mí, el festival es algo que sucede todos los años, pero para ellos no lo es.

Por eso quiero asegurarme de que el acto estelar sea todo un éxito. Quiero que termine sin problemas y que se convierta en un buen recuerdo para todos ellos. Sin embargo, cuanto más lo deseo, más me tiemblan las manos, más se bloquea mi mente, y soy incapaz de hacer nada.

“¡Ah! ¡Ay…me duele!”.

Antes de darme cuenta, al parecer había estado caminando por la sala de profesores sin darme cuenta.

Me tropecé con el escritorio del profesor de economía doméstica, derribando una gran cantidad de hojas apiladas.

Apresuradamente comencé a recogerlas.

Al parecer, eran parte de un trabajo que pedía escribir sobre alguien cercano al cual admirasen Había texto que hablaban de sus abuelas, a sus padres o incluso de entrevistas a músicos que eran parte de su familia.

Entre ellas, encontré la que parecía ser el trabajo de Kirishima-kun.

Y en la primera línea estaba escrito:

[La persona a la que admiro es mi profesora, Hikawa-sensei].

“¿Eh?”.

Mis manos comenzaron a temblar.

Sin embargo, era un temblor diferente al de antes.

Era una sensación de incredulidad.

Pero lo que estaba escrito ahí no dejaba lugar a dudas: hablaba de mí. Además, lo que venía a continuación eran puras palabras de elogió hacía mí.

Hikawa-sensei es estricta, pero siempre piensa en nosotros, los alumnos.

Entre todas las cosas, lo que más me alegró fue cuando le consulté a Hikawa-sensei sobre mis estudios, y me dijo: “Tú tienes potencial”.

Hasta ahora, no había tenido muchas experiencias en las que alguien creyera en mí. Por eso, saber que Hikawa-sensei confía en mí me hizo muy feliz.

Y en ese trabajo terminaba con las siguientes palabras.

Por eso, quiero convertirme en un adulto tan genial como Hikawa-sensei.

“…Qué tonto Kirishima-kun”.

*plop*

Una lágrima cayó sobre el papel.

Es su trabajo, no debía mojarlo. Lo sabía, pero no podía detener mis lágrimas.

¿Por qué? ¿Por qué escribiría que admira a alguien como yo?

“…”.

Un poco después, sentí que comenzaba a entender por qué Kirishima-kun había estado esforzándose tanto últimamente.

¿Y si, solo tal vez, la razón por la que está estudiando tan duro, la razón por la que se esfuerza tanto por el comité del festival, soy yo? ¿Si lo hace porque quiere ser como yo?

Yo le tenía miedo al hecho de que Kirishima-kun se convirtiera en un adulto.

Miedo de que se convirtiera en alguien especial, tan especial que me dejará atrás y llegará a ser un adulto.

Pero, ¿y si el “adulto” al que aspira a ser soy yo?

¿Y si Kirishima-kun está esforzándose y corriendo con todas sus fuerzas porque quiere llegar a donde estoy yo?

Si ese fuera el caso, entonces yo…

*Clap*

Me di una fuerte bofetada en la mejilla.

Los pensamientos que me inundaban hace poco comenzaron a volver poco a poco. Todavía no sé cómo resolver esta situación. Pero ahora sé lo que debo hacer.

Una vez, pensé en la relación entre un profesor y sus estudiantes es como una carrera de larga distancia.

Siempre pensé que los profesores, aunque comiencen a la cabeza del grupo, eventualmente será superados por sus estudiantes.

Pero si eso es cierto, entonces…

Salí corriendo de la sala de profesores.

Ya no tenía dudas. El lugar al que debía ir estaba decidido.

Los profesores, al final, son superados por sus estudiantes. Nos quedamos atrás.

Pero, si no queremos que eso suceda, lo único que podemos hacer es seguir corriendo.

Seguir cambiando.

¡Corre!

Debo seguir siendo alguien a quien Kirishima-kun quiera seguir admirando.

Cambiar es un privilegio de los jóvenes, pero si nos esforzamos, los adultos también podemos cambiar.

¡Por eso, corre!

Para no ser dejada atrás por Kirishima-kun

Para poder seguir estando siempre a su lado.

En ese momento, mientras corría, lo vi. Y en medio del pasillo, detuve mis pasos.

El chico que había estado buscando todo este tiempo.

Y finalmente, al encontrarlo, dije las palabras que hasta ahora no había podido pronunciar.

Como profesora. Como adulta.

“Kirishima-kun… ¿Puedo depender de ti?”.

^[1] National Parent Teacher Association (PTA) Se compone de familias, estudiantes, administradores y líderes empresariales de la comunidad consagrados a lograr el progreso educativo de los niños y la promoción de participación familiar en las escuelas

***

“Kirishima-kun… ¿Puedo depender de ti?”.

Por mi cuenta, no puedo hacer nada.

Por eso, mientras corría buscando a Hikawa-sensei. Me encontré con ella diciéndome esas palabras, una extraña sensación de euforia me invadió.

Porque, hasta ahora, yo era solo un niño.

Por eso, nunca había sido alguien en quien Hikawa-sensei confiara.

Y eso, justamente, me hacía sentir que me trataba como un niño, lo cual detestaba.

Por eso, quería convertirme en un adulto digno de ella.

Pero ahora, aquí en la escuela, Hikawa-sensei por fin ha confiado en mí.

Si ese era el caso, entonces solo había una respuesta posible.

“¡Sí!”, asentí con todas mis fuerzas.

De repente, Hikawa-sensei colapsó en el suelo. ¿Eh, qué? ¿Q-Qué pasó?.

“¿Es-Estás bien, Hikawa-sensei?”.

“S-si, estoy bien. Es solo que al verte, sentí un gran alivio”.

“¿E-En serio?”.

“Y además…lo siento. Seguro que te decepcioné, ¿no? No solo en mi vida personal, sino también al mostrarme tan nerviosa ahora mismo”.

“No, ¡para nada! Hikawa-sensei sigue siendo la increíble y genial profesora a la que admiro”.

“¿E-En serio? E-Entonces, eso me tranquiliza un poco”.

Hikawa-sensei, con su “modo profesora” aún activo, tenía las mejillas completamente sonrojadas. Estaba súper linda.

Aunque…no había tiempo para andar haciendo una comedia romántica, ¿verdad? Ella debió llegar a la misma conclusión, porque sacudió la cabeza vigorosamente.

“E-Entonces, ¿sabes lo que está ocurriendo?”.

“Si, aunque no tengo idea de qué hacer…”.

Aunque Hikawa-sensei me había pedido ayuda, yo no era alguien que pudiera idear un plan brillante de inmediato.

Y entonces, en ese momento.

Bueno, para ser exactos, tenía algo que apenas podía llamarse una idea.

Sin embargo, había problemas, y no estaba seguro de si sería posible llevarlo a cabo.

Nuestras miradas se cruzaron, y Hikawa-sensei pareció darse cuenta de que algo se me había ocurrido.

“Kirishima-kun, ¿tienes alguna idea…?”.

“N-No, no es exactamente una idea, pero…¿recuerdas esa vez que pasamos por la zona donde está el embotellamiento cuando íbamos en bicicleta juntos?”.

“Si, si,  lo recuerdo”.

Hikawa-sensei abrió mucho los ojos como si acabara de darse cuenta.

“Esa vez, aunque íbamos en bicicleta, volver tomó menos tiempo de lo que esperaba, ya que algunas de esas calles tienen muchas bajadas. Si usamos bien esas rutas, podríamos llegar a tiempo. Pero…aun así, no sé si podré llegar a tiempo…”

Si, ese era el problema.

Ir en bicicleta ahora, recogerla y traerla.

Por mucho que me esforzara, el tiempo seguiría siendo un poco justo. Incluso si el grupo que está ahora en el escenario se extendiera en su presentación, necesitaríamos otro número para llenar el tiempo.

Pero improvisar algo tan rápido…

“Eso lo haré yo”.

“¿Eh?”.

“Por eso, déjamelo a mí. No estoy segura de sí lo haré bien, pero encontraré la forma de ganar algo de tiempo. Así que, ¿puedo pedirte que vayas a recogerlos?”.

“¡Sí!”.

No sabía si llegaría a tiempo o no.

Pero, una vez que Hikawa-sensei me lo pidió de esa forma, no había forma de rechazarla.

“Entonces, ¡Hikawa-sensei! ¡Me voy!”.

“¡Muy bien! ¡Yo ganaré tiempo hasta que llegues!”.

“Entonces, ¡te dejó a cargo!”.

Ambos sonreímos, y al mismo tiempo nos dimos la espalda.

Nos volvimos a mirar y seguimos avanzando.

Ya no escuchaba los pasos de Hikawa-sensei detrás de mí.

Pero esa confianza que me había depositado seguía conmigo y me hacía sentir increíblemente feliz.

°°°

“Pero, ¿cómo voy a ganar tiempo…?”.

No era una declaración basada en una idea clara.

Mientras corría hacia el camerino, mi mente daba vueltas, pero a medida que me acercaba, no se me ocurría nada.

Aunque quisiera añadir un nuevo número, ¿habría alguien disponible para hacerlo de inmediato?

Ya habían hecho algo de tiempo extra, pero aun así, si seguimos así, estaremos cortos de personal.

Ya he agotado todas las opciones. No hay más jugadas que pueda hacer.

Pero le hice una promesa a Kirishima-kun.

Entonces, solo tengo una opción: hacer lo que tenga que hacer.

Tal vez si subiera al escenario e hiciera algo…No, pero no sé hacer nada.

¡Ah, sí tan solo hubiera aprendido a bailar o a dibujar!

“…Ah”.

No, espera. Hay algo que sí sé hacer. Solo una cosa.

Para ser honesta, me sería demasiado vergonzoso.

Pero ahora mismo, parece que no tengo otra opción.

“¡Ah! H-Hikawa-sensei, en realidad, ahora mismo la situación…es muy grave”

“Si, ya estoy al tanto de la situación”.

Cuando entré al camerino, Tojo-san me recibió.

Tojo-san lucía demasiado pálida.

Los demás estudiantes también estaban iguales. Todos los que estaban en el camerino me miraban con expresiones de preocupación.

Con voz tranquilizadora, intenté calmarlos.

“Tranquilos. Seguro que todo saldrá bien. Solo necesitamos ganar un poco de tiempo”.

“¿Ganar tiempo…? ¿Cómo vamos a hacerlo? Ya hemos gastado todas nuestras opciones y no creo que sea posible añadir más números…”.

“Eso es algo que yo resolveré. Así que, todos, por favor, sigan con los planes como estaban”.

Dije exactamente las mismas palabras que le había dicho a Kirishima-kun y me dirigí al escenario.

Mientras caminaba, me quité las gafas y la liga con la que me recogía el cabello.

Algunos estudiantes que pasaban me miraron sorprendidos, pero era comprensible. No era común que me vieran con esta apariencia en la escuela.

Pero, no había otra opción.

A partir de aquí, no podía ser Hikawa-sensei.

“Eh, eh, Hikawa-sensei…”.

“Sí, ¿qué pasa?”.

Sonriendo amablemente hacia Tojo-san, que me había seguido, ella se quedó paralizada, mirando sorprendida. ¿Hice algo raro?

Pero, justo en ese momento, era perfecto. Yo iba a pedirle algo a Tojo-san.

“Tojo-san, puedes encargarte de poner esta música, por favor?”.

“Si, no hay problema, pero…”.

“Entonces, lo dejo en tus manos”.

Dije eso con una sonrisa, y tan pronto como terminé de hablar, me subí al escenario, reemplazando al anterior acto.

Muchos de los estudiantes que me conocían se quedaron petrificados al verme, igual que Tojo-san. Pero, si me conocían, entonces eso era lo esperado.

Sin embargo, como ya dije antes, en este momento no podía ser Hikawa-sensei. Por eso, me quité mi máscara.

La máscara que había llevado durante todo este tiempo siendo profesora.

Me convertí en quien siempre fui.

Es decir, en Mashiro Hikawa, una simple otaku que además es novia de Kirishima-kun.

“¡…!”.

Al volver a mi verdadero yo, sentí cómo mis piernas temblaban al ser observada por tantas personas.

Aun así, cuando la música comenzó a sonar desde arriba, mi cuerpo se movió por sí solo.

Por qué lo recordaba perfectamente, esto fue mi juventud.

Era el ending[1] de una novela ligera que adoraba y había escuchado una y otra vez.

Y de un momento a otro, al ritmo de la música que resonaba desde los altavoces, empecé a bailar con todas mis fuerzas.

***

Sin preocuparme por nada más, empecé a pedalear cuesta abajo en la bicicleta que le había prestado a Natsuki.

Hikawa-sensei estaba haciendo lo posible para ganar tiempo. Si era así, no me quedaba otra opción que confiar en ella y seguir pedaleando.

Puse toda mi energía en empujar los pedales con desesperación. Cada vez que los apretaba, sentía cómo creía una fuerza imparable en mi interior.

¿Cuánto tiempo habré pedaleado desde entonces?

Delante de mí, vi una multitud de coches atrapados en un enorme embotellamiento. Era imposible cambiar de dirección, y la mayoría de los vehículos estaban inmovilizados.

Entre ellos, había un taxi.

Aprovechando el impulso de la bajada, frené casi deslizándome al lado del taxi y me dirigí hacia al taxi levantando la voz.

“¡Soy estudiante de la preparatoria de Keika! ¿¡Está aquí Shiho Hoshimiya!?”.

“¿¡Q-Quién anda gritando tan fuerte en un lugar como este!? ¿Qué estás haciendo, chico?”.

Del taxi salió un hombre que parecía ser el mánager de Shiho Hoshimiya. Sin embargo, no tenía tiempo para dudar. Levanté aún más la voz.

“¡Soy Takuya Kirishima, representante del comité organizador del Festival de Keika! ¡Por favor, le pido que venga conmigo ahora mismo!”.

“¿Q-Qué? ¿¡De qué estás hablando!? ¡Estamos en camino al próximo evento ahora mismo! ¡Es imposible que lleguemos a tiempo! ¡Tú también deberías saberlo!”.

“¡Por favor, haga algo al respecto!”.

“¡Imposible es imposible! Además, ¿qué haces con una bicicleta? ¡No me digas que planeas llevar a Hoshimiya en bicicleta!”.

“¡Por favor, permítame llevar a Shiho Hoshimiya!”.

“¿¡Acaso no me estás escuchando, chico!?”.

Pero…no tengo habilidad para hacer negociaciones complicadas en este momento. Todo lo que puedo hacer es insistir, insistir y no dejar de insistir.

Sin embargo, el tiempo seguía pasando mientras estábamos en esta situación.

¡Maldita sea, ¿qué hago?

No esperaba que el mánager fuera un problema aquí.

En ese momento, mientras consideraba incluso usar la fuerza.

“Por favor, no seas tan malo con él, Munakata-san”.

Una voz tan clara como el sonido de una campanilla.

Acompañada por ese tono cristalino, del taxi salió una hermosa chica. Era Shiho Hoshimiya.

Mi primera impresión fue que estaba viendo un ángel. Era la primera vez que veía a una celebridad en persona, y no sé cómo explicarlo, pero…

Pude sentir que hay personas que tienen un aura especial a su alrededor. ¡Y su rostro era tan pequeño!

¡Qué linda! Aunque, bueno, no tan linda como Hikawa-sensei.

“Si se trata de mí, no me importa correr. Después de todo, este es un evento importante, y quiero que sea un éxito”.

“Pe-Pero–”.

“Yo misma hablaré con el presidente, ¿de acuerdo? ¿Eso está bien?”.

Shiho Hoshimiya sacó la lengua de manera adorable y guiño un ojo. Cada gesto suyo parecía sacado de una ilustración, como era de esperarse.

Aunque de mala gana, el mánager pareció aceptar la propuesta de Shiho Hoshimiya.

“Entonces, ¿me llevarás a la preparatoria de Keika?”.

“¡Si! Por favor, súbase a la bicicleta…aunque, ¿está segura de que está bien?”.

Pensándolo bien, ¿no sería algo peligroso llevar a una super popular seiyuu en bicicleta? Si alguien lo sube a las redes sociales, sería un escándalo inmediato.

Pero…

“No te preocupes. Me cubriré así”.

Shiho Hoshimiya se puso unas gafas de sol y una mascarilla. Solo con eso, era difícil reconocerla.

Después, sonrió bajo la mascarilla, o eso parecía, pues sus ojos se entrecerraron con dulzura.

“Bueno, entonces, cuento contigo. Llévame a la preparatoria de Keika”.

“¡Entendido! ¡Vamos!”.

Al igual que aquella vez con Hikawa-sensei, Shiho Hoshimiya se sentó en la parte trasera de la bicicleta.

En el instante en que se sentó, comencé a pedalear nuevamente. Todo avanzaba sin problemas.

Seguimos avanzando sin problemas. Al parecer eso llamó la atención de Shiho-san, quien me habló desde atrás.

“Sabes, parece que tienes experiencia”.

“¡Practiqué!”.

La experiencia de haber llevado a Hikawa-sensei en bicicleta ahora estaba dando frutos.

Gracias a eso, llegamos mucho más rápido de lo esperado–

“Ah…”.

Al entrar a la escuela y ver el escenario principal la pude ver.

En el escenario, Hikawa-sensei estaba bailando con todas sus fuerzas.

La soberana absoluta del hielo. La profesora que incluso era apodada como “Yukihime” estaba dando un espectáculo completo.

El público entero estaba emocionado al verla. Y además, ese baile era el mismo que me mostró antes, uno de un anime de hace mucho tiempo.

Shiho-san se echó a reír, soltando un par de carcajadas.

“Tienes una profesora muy interesante, ¿no es cierto?”.

“Si, es la mejor profesora”.

Mientras observaba a Hikawa-sensei rodeada de vítores y aplausos sin parar, eso fue lo que respondí.

[1] Está bailando el ending de Haruhi Suzumiya, “Hare Hare Yukai”

Si quieren verlo, aquí les dejó en enlace https://youtu.be/EI7BKnOGWVs