Hikawa-sensei Wants an Otaku Boyfriend Volumen 3
Capítulo 5
Capítulo 5
“Bien, con esto damos por terminado la reunión del comité organizador del festival cultural”.
Era después de clases. Y me encontraba en el salón de clases que se usaba para realizar las reuniones.
Cuando declaré esas palabras con nerviosismo, los estudiantes que formaban parte del comité se levantaron uno a uno y comenzaron a dispersarse. Algunos se quedaron en el salón conversando con sus amigos, pero la mayoría regresó a sus respectivas clases. Y esos estudiantes se miraban y sonreían burlonamente, o parecían hablar de cómo la conducción de la reunión había sido extraña.
Es verdad que, aunque nunca logré hacer las reuniones de manera perfecta, últimamente fui mejorando cada vez más para poder dirigir las reuniones de manera más fluida. Bueno, todavía tartamudeaba por momentos, pero solo era de vez en cuando.
Y hubo un gran cambio aparte de ese.
Desde que terminó la reunión con la editorial, siento que la actitud de todos los demás se ha ido suavizando.
No es que haya empezado a hablar con alguien, sigo estando solo como siempre. Pero siento que sus miradas se han vuelto menos temerosas a mi persona.
Bueno, también es posible que todo sea producto de mi imaginación.
“Buen trabajo, Kirishima-kun”.
Al levantar la vista, Tojo-senpai estaba parada a mi lado con una sonrisa.
“¿Cómo te va? Parece que te estás poniendo menos nervioso últimamente”.
“Si, eso creo. Todavía hay momentos donde me gana la tensión, pero…creo que me estoy acostumbrando”.
En realidad, no estoy haciendo nada extraordinario.
Simplemente, estoy aplicando lo que Hikawa-sensei me enseñó.
Por eso, aunque parezca difícil mejorar para Kirishima-kun, en realidad es bastante simple.
Solo tienes que volver al punto desde donde te equivocaste y volver a estudiar desde ese punto.
Con solo eso, pude mejorar.
En aquel entonces se trataba de estudiar, pero pensé que se podía aplicar también a la forma de llevar a cabo una reunión como esta.
Desde entonces, por las noches he estado pensando sobre mis errores y buscando soluciones para aplicarlos a futuro. Sin embargo, debido a la cantidad anormal de errores que cometí, sólo recientemente he podido aplicar algunas de las cosas que pensé en práctica.
“Ya veo”.
Tojo-senpai asintió con una sonrisa ante mi respuesta.
“Es importante que pienses así. No olvides ese sentimiento”.
“Si, gracias”.
“Cambiando de tema, ¿Has estado visitando tu clase?”.
“¿Eh? ¿Mi clase?”.
“…Lo sabía”.
Ante mi reacción, Tojo-senpai suspiró suavemente.
“Como has estado todo el tiempo en el comité, pensé que tal vez no lo habías considerado, pero sería mejor que fueras a tu clase de vez en cuando. Sería una pena perderte el festival si al final no pasas tiempo con tus amigos”.
Está bien, de todos modos, no tengo amigos
Aunque pensé en eso, no podía decirle directamente. Definitivamente se pondría demasiado incómodo el ambiente.
“Tómalo como un consejo de tu senpai. ¿Qué tal si ayudas a tu clase hoy?”.
Con una sonrisa, Tojo-senpai me dijo eso, y asentí vagamente.
Aunque me diga eso…
Desde que comenzaron los preparativos para el festival cultural, no he ayudado en nada a mi clase.
En esta situación, ¿habrá algo para lo que me necesiten?
Honestamente, he usado el asunto del comité como una excusa.
Si trabajaba en el comité, no tenía que ayudar en el salón de clases. Así, podría evitar interactuar con mis compañeros de clases y sentirme incómodo. Por eso, siempre he estado evitando ir a clases, pero llegados a esto… ¿En serio tengo que ir?
Mientras caminaba con esos pensamientos en mente.
“Oye, Takuya, ¿Qué haces por aquí?”.
“¡Ah, Ryoma…!”.
Al doblar en la esquina del pasillo, estaba Ryoma, el guapo profesor de matemáticas. Ryoma fue mi tutor privado cuando estaba en la secundaria y ahora es profesor en la preparatoria.
En otras palabras, es una de las pocas personas que me conoce desde antes…Por eso, al igual que Konoha, siento una cierta incomodidad al hablar con él.
Es como si supiera todos mis secretos. Podría decirse que es como si me encontrará con mi hermano mayor.
Por eso, levanté la mano para darle un breve saludo y alejarme, pero la voz de Ryoma me detuvo.
“Oye, Takuya. Por cierto, Shinbashi-sensei de la clase economía doméstica te estaba buscando. Parece que todavía no has entregado una tarea”.
“Ahhhh…”.
Oh sí, me acuerdo de esa tarea.
Si no recuerdo mal, era una tarea de redacción sobre “una persona a la que admiras”, pero si mal no recuerdo creo que también se podría hacer sobre una figura histórica. Así que lo más fácil sería tomar prestados libros sobre personajes históricos de la biblioteca y escribir sobre ellos…Pero se me olvidó por completo con todo este revuelo sobre el festival de Keika. ¿No era la fecha límite hace una semana? Esto es terrible.
“Vaya, realmente necesito hacer algo al respecto…”.
“Por supuesto que tienes que hacer algo al respecto. Takuya, sé que has estado trabajando duro últimamente, pero, no dejes que algo tan trivial baje tus notas”.
“Cállate, lo sé, lo sé”.
¿Se cree mi hermano mayor o qué?
Bueno, ya que ha estado cuidado de mí durante tanto tiempo, es algo parecido.
Mientras teníamos esa conversación…
“¡Oh, Shinohara-sensei, está aquí!”.
Dos alumnas vinieron corriendo por el pasillo.
Por el color de sus pañuelos parecían ser de primer año.
Las dos chicas se acercaron a Ryoma con una actitud alegre y, tirando de la manga de su ropa, dijeron:
“¡Nee, nee Shinohara-sensei! ¿Quieres salir con nosotros en el festival cultural? Nuestra clase está haciendo una panadería, así que…”.
“Si, lo entiendo. Si tengo tiempo, pasaré. Así que muévanse, ¿Deben prepararse para el festival cultural, no es cierto?”.
“¡Si! ¡Si, no lo olvide! ¡No rompa su promesa!”.
Rechazadas de una manera elegante, las dos estudiantes se fueron agitando la mano.
Viendo eso, dije.
“Ryoma, no te dejes atrapar”.
“¿Y tú de qué hablas?”.
Ryoma me miró de reojo, pero sus ojos estaban completamente llenos de aburrimiento.
“Esto es una tradición. Es común que los estudiantes inviten a los profesores a citas. Esta vez fueron estas chicas de primer año, pero todos los años aparecen estudiantes similares”.
“Así que todos los profesores pasan por lo mismo…”.
Qué extraña tradición.
“Es eso, así que deja de pensar cosas raras. Después de todo, que un profesor salga con un estudiante sólo es algo que ocurre en los mangas. En la vida real como alguien haría tal cosa, ¿cierto?”.
“…Si, tienes razón”.
¡Qué demonios! ¡Qué miedo!
No creo que lo haya dicho a propósito, pero siento como el sudor me recorre la espalda, si fue una coincidencia, qué coincidencia tan desagradable.
“Bueno, es cierto que a veces es muy molesto que los estudiantes le confiesen sus sentimientos a un profesor. Probablemente, se sienten atraídos por la atmósfera de los profesores…Especialmente, ¡casi todos los años alguien se confiesa a Sakurai-sensei!”.
“Ah, sí”.
Sakurai-sensei es la bibliotecaria.
Es muy bonita, es tan hermosa, que parece una enfermera de manga shoujo.
De hecho, no es extraño que cada año haya estudiantes que se enamoran de ella.
Y ahí fue cuando se me ocurrió preguntar.
“Oye, Ryoma. Tú, ¿Qué harías si un estudiante te confesara sus sentimientos?”.
“¡Obviamente, la rechazaría!”.
“¡Respondiste de inmediato! ¿¡Ni siquiera lo considerarías!? Son estudiantes de preparatoria, ¡Si rechazas a todas puede que nunca más vuelvas a ser popular entre las chicas!”.
“¿Pero ¿qué quieres que te diga?”, dijo Ryoma con desdén, luego de mirar en dirección a donde se habían ido las estudiantes.
“Aun así, la rechazaría. Claro, si ignoro mi deber como profesor podría ser divertido por un tiempo, pero siempre habrá problemas a futuro”.
“¿Problemas…?”.
“Si”.
Asintiendo, Ryoma dijo mientras recordaba algo:
“Un estudiante y un profesor son como un niño y un adulto. Esa diferencia se manifestará en muchos aspectos. No solo en el estudiante, sino…sobre todo en el profesor”.
Tenía demasiado miedo para preguntar el verdadero significado de sus palabras.
Unos minutos después de separarme de Ryoma, me dirigí a la biblioteca para buscar libros para mi tarea.
De todos modos, ¿Qué quiso decir Ryoma con eso?
Es cierto que siempre he tenido una que otra diferencia con Hikawa-sensei. Nuestras opiniones, los animes que vemos…Pero, ¿Qué quiso decir con que esa diferencia se manifiesta sobre todo con el profesor?
Mientras me dirigía a la biblioteca, escuché.
“¡Oh, Kirishima-senpai! ¡Kirishima-senpai! ¿Qué haces por aquí?”.
¿Había alguien que me llamará “senpai”?
Antes de que pudiera pensar más en ello, me di la vuelta y lo entendí todo.
Era Konoha quien se acercaba corriendo hacia mí. Detrás de ella había un chico. A juzgar por el color de sus zapatillas, debía ser de primer año. Sin embargo, al verme su rostro se contorsionó visiblemente por el miedo. Parece que mi mala reputación ya había llegado hasta los de primer año.
Pero bueno, eso era lo de menos por ahora.
“Eh, ¿Kirishima-senpai? Kirishima-senpai, ¿Me quieres decir algo?”.
Tan pronto como se acercó, Konoha dijo algo que yo no había dicho. Parecía que estaba tratando de hacer que pareciera que yo había sido quien se detuvo para hablar con ella.
No sé si se creyó esa tontería, pero el chico que la acompañaba dijo “Bueno, nos vemos Kozakura-san” y se fue rápidamente.
Después de despedirlo, Konoha apretó suavemente el puño y dijo: “Bien, ¡Misión cumplida, Takuya!”.
“¿Qué estás haciendo?”.
Sin pensarlo, le di un ligero golpe en la cabeza a Konoha.
Por la actitud de Konoha, parecía que había intentado usarme para hacer escapar al chico.
Probablemente, dijo mi apellido a propósito en lugar de llamarme por mi nombre. Supongo que, si me llamará Takuya, nadie me entendería.
“Auch. ¿Qué te pasa, Takuya? Eso me dolió”.
Konoha se frotó la cabeza y me miró con resentimiento, pero no me importó.
“Entonces, ¿Por qué hiciste eso?”.
“Bueno, es lo típico en los festivales. Alguien se emociona por sí solo y luego…ya sabes”.
La explicación de Konoha fue vaga, pero entendí lo que quería decir.
En resumen, era un asunto sentimental. La forma en que ese chico me miraba me lo dejó claro.
“Ese chico es muy popular, así que, si lo rechazó abiertamente, me meteré en problemas”.
“¿En serio? ¿Quizás quiera vengarse?”.
“Eso sería lo de menos. Lo que me da más miedo son las chicas, seguro dirán cosas como: ‘¿Por qué lo rechazaste?’ ‘¿Te crees muy buena para él?’ Y cosas así”.
Era información que preferiría no saber.
“No todos son así, pero bueno…”.
Mientras yo me estremecía ante ese mundo desconocido, Konoha me miró de reojo y dijo:
“Así que, como no quiero volver al salón de clases, te seguiré”.
Con sus ojos me preguntaba si estaba bien que me siguiera.
Por experiencia, sé que, aunque la rechace, me seguirá de todos modos. Así que lo más inteligente es rendirme desde el principio.
Así que me dirigí a la biblioteca junto con Konoha.
“Oye, Konoha, ¿Por qué últimamente has dejado de venir a casa?”.
Cuando le pregunté casualmente, Konoha parpadeó y luego esbozó una sonrisa burlona.
“¿Qué? ¿Qué te pasa, Takuya? ¿Acaso me extrañas?”.
“Claro que no. Solo me preguntaba porque antes decías que querías venir a mi casa todo el tiempo, y ahora de repente dejaste de hacerlo”.
No recuerdo la fecha exacta, pero creo que dejó de venir después de que interrumpiera en mi casa cuando estaba haciendo un campamento de estudio con Hikawa-sensei.
Antes de eso, a pesar de que le pedía que se detuviera, insistía en ir a mi casa.
“Bueno, no hay ninguna razón en particular. Simplemente se volvió una molestia ir, así que dejé de hacerlo. Pero si Takuya insiste en que vaya, no tengo más remedio que hacerlo, ¿verdad? No quiero en verdad. Pero si me insistes tanto”.
“¿Sabes qué? No quiero que vengas más. No vuelvas nunca”.
Konoha me dio un codazo en el costado y mientras apartaba su mano, se quedó atrás de repente.
“Es solo que…cambiaste de repente, me pareció un poco extraño”.
“¿Extraño, dices?”.
Konoha repitió eso en voz baja.
“…Pero, entonces, creo que Takuya-san es mucho más extraño. Escuché que eras el representante del comité organizador del festival cultural. Los chicos de mi clase decían cosas como: ‘Finalmente, ese Kirishima Takuya está tratando de arruinar el festival cultural’”.
“¡En serio, qué clase de persona creen que soy!”.
“Entonces, ¿qué pasó para que te convirtieras en representante?”.
“Eso no importa”.
Mientras teníamos esa conversación trivial, llegamos a la biblioteca.
Mientras buscaba libros en la biblioteca, de repente me entró curiosidad y pregunté:
“Por cierto, Konoha, ¿qué está planeando hacer tu clase para el festival?”.
“¿Eh? ¿Mi clase?”.
Tan pronto como le pregunté, Konoha repentinamente se tensó.
Entonces, mirando alrededor de manera nerviosa dijo:
“Uh, um…no me acuerdo. Bueno, en realidad. No estoy interesada en el festival, así que no me importa”.
“Incluso siendo así, ¿por qué no sabes lo que está haciendo tu clase para el festival, haces parte de tu clase, no es cierto?”.
¡Incluso yo lo sé!
Bueno, me enteré hace poco, gracias a Natsuki.
Pero, como siempre, Konoha seguía mirando hacia otro lado fingiendo no saber nada.
No puedo evitarlo. Cuando alguien miente tan descaradamente, me da curiosidad, así que usaré mi autoridad adquirida tras ser representante del comité.
“Bueno, creo que la clase de Konoha es la 1-4, 1-4, 1-4…debe estar por aquí”.
“Eh, espera un momento. ¿Por qué tienes la lista de las presentaciones de todas las clases?”.
“Bueno, eso debería ser obvio, soy el representante”.
“¡Espera, espera, detente! ¡Eso está prohibido! ¡No puedes hacer eso!”.
“O-oye, Konoha. ¡No intentes quitarme mi teléfono!”.
“¡Ugh!”.
Por estar forcejeando por mi teléfono, Konoha y yo terminamos enredados y cayendo al suelo.
“Maldición, me duele… ¡Demonios, por qué te resistes tanto!”.
“Uuuh, me duele…”.
“¿…Eh?”.
Por otro lado, Konoha también cayó al suelo, amortiguando la caída con mi cuerpo.
Cerca de ella, había una libreta que parecía ser suya.
Por casualidad, la libreta estaba abierta en una página.
Curiosamente, eché un vistazo.
Pero antes de que pudiera ver lo que estaba en su interior, Konoha recuperó su libreta con una velocidad increíble.
Sosteniéndola con fuerza contra su pecho, como si fuera algo muy valioso.
Sus orejas estaban de un rojo intenso, como nunca las había visto antes.
Su expresión era de más nerviosismo, que antes cuando estaba investigando lo que haría su clase.
“Bien, con esto damos por terminado la reunión del comité organizador del festival cultural”.
Era después de clases. Y me encontraba en el salón de clases que se usaba para realizar las reuniones.
Cuando declaré esas palabras con nerviosismo, los estudiantes que formaban parte del comité se levantaron uno a uno y comenzaron a dispersarse. Algunos se quedaron en el salón conversando con sus amigos, pero la mayoría regresó a sus respectivas clases. Y esos estudiantes se miraban y sonreían burlonamente, o parecían hablar de cómo la conducción de la reunión había sido extraña.
Es verdad que aunque nunca logré hacer las reuniones de manera perfecta, últimamente fui mejorando cada vez más para poder dirigir las reuniones de manera más fluida. Bueno, todavía tartamudeaba por momentos, pero solo era de vez en cuando.
Y hubo un gran cambio aparte de ese.
Desde que terminó la reunión con la editorial, siento que la actitud de todos los demás se ha ido suavizando.
No es que haya empezado a hablar con alguien, sigo estando solo como siempre. Pero siento que sus miradas se han vuelto menos temerosas a mi persona.
Bueno, también es posible que todo sea producto de mi imaginación.
“Buen trabajo, Kirishima-kun”.
Al levantar la vista, Tojo-senpai estaba parada a mi lado con una sonrisa.
“¿Cómo te va? Parece que te estás poniendo menos nervioso últimamente”.
“Si, eso creo. Todavía hay momentos donde me gana la tensión, pero…creo que me estoy acostumbrando”.
En realidad, no estoy haciendo nada extraordinario.
Simplemente, estoy aplicando lo que Hikawa-sensei me enseñó.
Por eso, aunque parezca difícil mejorar para Kirishima-kun, en realidad es bastante simple.
Solo tienes que volver al punto desde donde te equivocaste y volver a estudiar desde ese punto.
Con solo eso, pude mejorar.
En aquel entonces se trataba de estudiar, pero pensé que se podía aplicar también a la forma de llevar a cabo una reunión como esta.
Desde entonces, por las noches he estado pensando sobre mis errores y buscando soluciones para aplicarlos a futuro. Sin embargo, debido a la cantidad anormal de errores que cometí, sólo recientemente he podido aplicar algunas de las cosas que pensé en práctica.
“Ya veo”.
Tojo-senpai asintió con una sonrisa ante mi respuesta.
“Es importante que pienses así. No olvides ese sentimiento”.
“Si, gracias”.
“Cambiando de tema, ¿Has estado visitando tu clase?”.
“¿Eh? ¿Mi clase?”.
“…Lo sabía”.
Ante mi reacción, Tojo-senpai suspiró suavemente.
“Como has estado todo el tiempo en el comité, pensé que tal vez no lo habías considerado, pero sería mejor que fueras a tu clase de vez en cuando. Sería una pena perderte el festival si al final no pasas tiempo con tus amigos”.
Está bien, de todos modos, no tengo amigos
Aunque pensé en eso, no podía decirle directamente. Definitivamente se pondría demasiado incómodo el ambiente.
“Tómalo como un consejo de tu senpai. ¿Qué tal si ayudas a tu clase hoy?”.
Con una sonrisa, Tojo-senpai me dijo eso, y asentí vagamente.
Aunque me diga eso…
Desde que comenzaron los preparativos para el festival cultural, no he ayudado en nada a mi clase.
En esta situación, ¿habrá algo para lo que me necesiten?
Honestamente, he usado el asunto del comité como una excusa.
Si trabajaba en el comité, no tenía que ayudar en el salón de clases. Así, podrías evitar interactuar con mis compañeros de clases y sentirme incómodo. Por eso, siempre he estado evitando ir a clases, pero llegados a esto…¿En serio tengo que ir?
Mientras caminaba con esos pensamientos en mente.
“Oye, Takuya, ¿Qué haces por aquí?”.
“¡Ah, Ryoma…!”.
Al doblar en la esquina del pasillo, estaba Ryoma, el guapo profesor de matemáticas. Ryoma fue mi tutor privado cuando estaba en la secundaria y ahora es profesor en la preparatoria.
En otras palabras, es una de las pocas personas que me conoce desde antes…Por eso, al igual que Konoha, siento una cierta incomodidad al hablar con él.
Es como si supiera todos mis secretos. Podría decirse que es como si me encontrará con mi hermano mayor.
Por eso, levanté la mano para darle un breve saludo y alejarme, pero la voz de Ryoma me detuvo.
“Oye, Takuya. Por cierto, Shinbashi-sensei de la clase economía doméstica te estaba buscando. Parece que todavía no has entregado una tarea”.
“Ahhhh…”.
Oh sí, me acuerdo de esa tarea.
Si no recuerdo mal, era una tarea de redacción sobre “una persona a la que admiras”, pero si mal no recuerdo creo que también se podría hacer sobre una figura histórica. Así que lo más fácil sería tomar prestado libros sobre personajes históricos de la biblioteca y escribir sobre ellos…Pero se me olvidó por completo con todo este revuelo sobre el festival de Keika. ¿No era la fecha límite hace una semana? Esto es terrible.
“Vaya, realmente necesito hacer algo al respecto…”.
“Por supuesto que tienes que hacer algo al respecto. Takuya, sé que has estado trabajando duro últimamente, pero, no dejes que algo tan trivial baje tus notas”.
“Cállate, lo sé, lo sé”.
¿Se cree mi hermano mayor o qué?
Bueno, ya que ha estado cuidado de mí durante tanto tiempo, es algo parecido.
Mientras teníamos esa conversación…
“¡Oh, Shinohara-sensei, está aquí!”.
Dos alumnas vinieron corriendo por el pasillo.
Por el color de sus pañuelos parecían ser de primer año.
Las dos chicas se acercaron a Ryoma con una actitud alegre y, tirando de la manga de su ropa, dijeron:
“¡Nee, nee Shinohara-sensei! ¿Quieres salir con nosotros en el festival cultural? Nuestra clase está haciendo una panadería, así que…”.
“Si, lo entiendo. Si tengo tiempo, pasaré. Así que muevanse, ¿Deben prepararse para el festival cultural, no es cierto?”.
“¡Si! ¡Si, no lo olvide! ¡No rompa su promesa!”.
Rechazadas de una manera elegante, las dos estudiantes se fueron agitando la mano.
Viendo eso, dije.
“Ryoma, no te dejes atrapar”.
“¿Y tú de qué hablas?”.
Ryoma me miró de reojo, pero sus ojos estaban completamente llenos de aburrimiento.
“Esto es una tradición. Es común que los estudiantes inviten a los profesores a citas. Esta vez fueron estas chicas de primer año, pero todos los años aparecen estudiantes similares”.
“Así que todos los profesores pasan por lo mismo…”.
Qué extraña tradición.
“Es eso, así que deja de pensar cosas raras. Después de todo, que un profesor salga con un estudiante sólo es algo que ocurre en los mangas. En la vida real como alguien haría tal cosa, ¿cierto?”.
“…Si, tienes razón”.
¡Qué demonios! ¡Qué miedo!
No creo que lo haya dicho a propósito, pero siento como el sudor me recorre la espalda, si fue una coincidencia, qué coincidencia tan desagradable.
“Bueno, es cierto que a veces es muy molesto que los estudiantes le confiesen sus sentimientos a un profesor. Probablemente, se sienten atraídos por la atmósfera de los profesores…Especialmente, ¡casi todos los años alguien se confiesa a Sakurai-sensei!”.
“Ah, si”.
Sakurai-sensei es la bibliotecaria.
Es muy bonita, es tan hermosa, que parece una enfermera de manga shoujo.
De hecho, no es extraño que cada año haya estudiantes que se enamoran de ella.
Y ahí fue cuando se me ocurrió preguntar.
“Oye, Ryoma. Tú, ¿Qué harías si un estudiante te confesara sus sentimientos?”.
“¡Obviamente, la rechazaría!”.
“¡Respondiste de inmediato! ¿¡Ni siquiera lo considerarías!? Son estudiantes de preparatoria, ¡Si rechazas a todas puede que nunca más vuelvas a ser popular entre las chicas!”.
“¿Pero qué quieres que te diga?”, dijo Ryoma con desdén, luego de mirar en dirección a donde se habían ido las estudiantes.
“Aun así, la rechazaría. Claro, si ignoro mi deber como profesor podría ser divertido por un tiempo, pero siempre habrá problemas a futuro”.
“¿Problemas…?”.
“Si”.
Asintiendo, Ryoma dijo mientras recordaba algo:
“Un estudiante y un profesor son como un niño y un adulto. Esa diferencia se manifestará en muchos aspectos. No solo en el estudiante, sino…sobre todo en el profesor”.
Tenía demasiado miedo para preguntar el verdadero significado de sus palabras.
Unos minutos después de separarme de Ryoma, me dirigí a la biblioteca para buscar libros para mi tarea.
De todos modos, ¿Qué quiso decir Ryoma con eso?
Es cierto que siempre he tenido una que otra diferencia con Hikawa-sensei. Nuestras opiniones, los animes que vemos…Pero, ¿Qué quiso decir con que esa diferencia se manifiesta sobre todo con el profesor?
Mientras me dirigía a la biblioteca, escuché.
“¡Oh, Kirishima-senpai! ¡Kirishima-senpai! ¿Qué haces por aquí?”.
¿Había alguien que me llamará “senpai”?
Antes de que pudiera pensar más en ello, me di la vuelta y lo entendí todo.
Era Konoha quien se acercaba corriendo hacia mí. Detrás de ella había un chico. A juzgar por el color de sus zapatillas, debía ser de primer año. Sin embargo, al verme su rostro se contorsionó visiblemente por el miedo. Parece que mi mala reputación ya había llegado hasta los de primer año.
Pero bueno, eso era lo de menos por ahora.
“Eh, ¿Kirishima-senpai? Kirishima-senpai, ¿Me quieres decir algo?”.
Tan pronto como se acercó, Konoha dijo algo que yo no había dicho. Parecía que estaba tratando de hacer que pareciera que yo había sido quien se detuvo para hablar con ella.
No sé si se creyó esa tontería, pero el chico que la acompañaba dijo “Bueno, nos vemos Kozakura-san” y se fue rápidamente.
Después de despedirlo, Konoha apretó suavemente el puño y dijo: “Bien, ¡Misión cumplida, Takuya!”.
“¿Qué estás haciendo?”.
Sin pensarlo, le di un ligero golpe en la cabeza a Konoha.
Por la actitud de Konoha, parecía que había intentado usarme para hacer escapar al chico.
Probablemente, dijo mi apellido a propósito en lugar de llamarme por mi nombre. Supongo que si me llamará Takuya, nadie me entendería.
“Auch. ¿Qué te pasa, Takuya? Eso me dolió”.
Konoha se frotó la cabeza y me miró con resentimiento, pero no me importó.
“Entonces, ¿Por qué hiciste eso?”.
“Bueno, es lo típico en los festivales. Alguien se emociona por sí solo y luego…ya sabes”.
La explicación de Konoha fue vaga, pero entendí lo que quería decir.
En resumen, era un asunto sentimental. La forma en que ese chico me miraba me lo dejó claro.
“Ese chico es muy popular, así que si lo rechazó abiertamente, me meteré en problemas”.
“¿En serio? ¿Quizás quiera vengarse?”.
“Eso sería lo de menos. Lo que me da más miedo son las chicas, seguro dirán cosas como: ‘¿Por qué lo rechazaste?’ ‘¿Te crees muy buena para él?’ Y cosas así”.
Era información que preferiría no saber.
“No todos son así, pero bueno…”.
Mientras yo me estremecía ante ese mundo desconocido, Konoha me miró de reojo y dijo:
“Así que, como no quiero volver al salón de clases, te seguiré”.
Con sus ojos me preguntaba si estaba bien que me siguiera.
Por experiencia, sé que aunque la rechace, me seguirá de todos modos. Así que lo más inteligente es rendirme desde el principio.
Así que me dirigí a la biblioteca junto con Konoha.
“Oye, Konoha, ¿Por qué últimamente has dejado de venir a casa?”.
Cuando le pregunté casualmente, Konoha parpadeó y luego esbozó una sonrisa burlona.
“¿Qué? ¿Qué te pasa, Takuya? ¿Acaso me extrañas?”.
“Claro que no. Solo me preguntaba porque antes decías que querías venir a mi casa todo el tiempo, y ahora de repente dejaste de hacerlo”.
No recuerdo la fecha exacta, pero creo que dejó de venir después de que interrumpiera en mi casa cuando estaba haciendo un campamento de estudio con Hikawa-sensei.
Antes de eso, a pesar de que le pedía que se detuviera, insistía en ir a mi casa.
“Bueno, no hay ninguna razón en particular. Simplemente se volvió una molestia ir, así que dejé de hacerlo. Pero si Takuya insiste en que vaya, no tengo más remedio que hacerlo, ¿verdad? No quiero en verdad. Pero si me insistes tanto”.
“¿Sabes qué?. No quiero que vengas más. No vuelvas nunca”.
Konoha me dio un codazo en el costado y mientras apartaba su mano, se quedó atrás de repente.
“Es solo que…cambiaste de repente, me pareció un poco extraño”.
“¿Extraño, dices?”.
Konoha repitió eso en voz baja.
“…Pero, entonces, creo que Takuya-san es mucho más extraño. Escuché que eras el representante del comité organizador del festival cultural. Los chicos de mi clase decían cosas como: ‘Finalmente, ese Kirishima Takuya está tratando de arruinar el festival cultural’”..
“¡En serio, qué clase de persona creen que soy!”.
“Entonces, ¿qué pasó para que te convirtieras en representante?”.
“Eso no importa”.
Mientras teníamos esa conversación trivial, llegamos a la biblioteca.
Mientras buscaba libros en la biblioteca, de repente me entró curiosidad y pregunté:
“Por cierto, Konoha, ¿qué está planeando hacer tu clase para el festival?”.
“¿Eh? ¿Mi clase?”.
Tan pronto como le pregunté, Konoha repentinamente se tensó.
Entonces, mirando alrededor de manera nerviosa dijo:
“Uh, um…no me acuerdo. Bueno, en realidad. No estoy interesada en el festival, así que no me importa”.
“Incluso siendo así, ¿por qué no sabes lo que está haciendo tu clase para el festival, haces parte de tu clase, no es cierto?”.
¡Incluso yo lo sé!
Bueno, me enteré hace poco, gracias a Natsuki.
Pero, como siempre, Konoha seguía mirando hacia otro lado fingiendo no saber nada.
No puedo evitarlo. Cuando alguien miente tan descaradamente, me da curiosidad, así que usaré mi autoridad adquirida tras ser representante del comité.
“Bueno, creo que la clase de Konoha es la 1-4, 1-4, 1-4…debe estar por aquí”.
“Eh, espera un momento. ¿Por qué tienes la lista de las presentaciones de todas las clases?”.
“Bueno, eso debería ser obvio, soy el representante”.
“¡Espera, espera, detente! ¡Eso está prohibido! ¡No puedes hacer eso!”.
“O-oye, Konoha. ¡No intentes quitarme mi télefono!”.
“¡Ugh!”.
Por estar forcejeando por mi teléfono, Konoha y yo terminamos enredados y cayendo al suelo.
“Maldición, me duele…¡Demonios, por qué te resistes tanto!”.
“Uuuh, me duele…”.
“¿…Eh?”.
Por otro lado, Konoha también cayó al suelo, amortiguando la caída con mi cuerpo.
Cerca de ella, había una libreta que parecía ser suya.
Por casualidad, la libreta estaba abierta en una página.
Curiosamente, eché un vistazo.
Pero antes de que pudiera ver lo que estaba en su interior, Konoha recuperó su libreta con una velocidad increíble.
Sosteniéndola con fuerza contra su pecho, como si fuera algo muy valioso.
Sus orejas estaban de un rojo intenso, como nunca las había visto antes.
Su expresión era de más nerviosismo, que antes cuando estaba investigando lo que haría su clase.

Y konoha, que siempre parecía tan tranquila, dijo con una voz casi inentendible.
“¿L…Lo viste?”.
“N-No, no lo vi, pero… ¿qué hay en esa libreta?”.
“¡N-Nada! ¡No hay nada! ¡Eres un tonto Takuya!”.
“¿Por qué me insultas de repente…?”.
“Bueno, ¡me voy! ¡No quiero que piensen que estoy perdiendo el tiempo! ¡Nos vemos!”.
Acomodando su cabello, Konoha me dio la espalda y se fue corriendo.
“¿Qué demonios fue eso…?”.
Nunca la había visto reaccionar así. Era la primera vez en casi diez años que veía a Konoha tan nerviosa.
Sin embargo, la verdad era que si había visto la libreta.
Pero lo que tenía dentro era tan inesperado, que dudé si había visto bien.
“Esa foto…es de hace mucho tiempo”.
Era una foto de nuestra infancia, de cuando Konoha era mucho más fácil de entender de lo que es ahora.
Si mal no recuerdo, la tomó su madre, Haruka-san. Creo que fue al volver de una excursión. Estábamos uno al lado del otro. En esa época, Konoha siempre estaba llorando. De hecho, en la foto, parece estar a punto de llorar mientras agarraba la manga de mi camiseta.
Ni siquiera yo sé dónde tengo esa foto guardada.
Y Konoha la tenía en su libreta.
“¿Qué hace con esa foto?”.
Aunque me hice esa pregunta, la respuesta no llegó.
***
Después de tomar prestados algunos libros de la biblioteca, finalmente llegué a mi salón de clases.
Sin embargo, no pude entrar de inmediato.
¿…Debería entrar?
Con esa duda en mi mente, abrí la puerta un poco para echar un vistazo a la clase.
¿En serio tengo que ayudarlos?
“…Kirishima, ¿qué estás haciendo?”.
“¡Caraj!… Oh, eres tú, Natsuki”
Al ser llamado de repente por detrás, me asusté y solté un sonido extraño.
Detrás de mí estaba Natsuki, con una expresión de aburrimiento.
Por otro lado, Natsuki frunció el ceño.
“Es raro verte en clase, Kirishima. Ah, ¿Quizás terminaste temprano con tus deberes del comité?”.
“Es que bueno. Pensé en venir a ver la clase para ver si hay algo en lo que pueda ayudar… ¿hay algo en lo que pueda ayudar?”.
Natsuki está a cargo de la clase.
Ella sería la persona perfecta para preguntar.
Después de pensar un momento, Natsuki dijo:
“¿Algo en lo que puedas ayudar…? Hmm, aunque me lo digas, ahora mismo solo hay cosas pequeñas que hacer”.
“Eso está bien. De hecho, ¡es mucho mejor si son cosas pequeñas! ¿Qué debo hacer?”.
“¿Por qué de repente tus ojos brillan al saber que solo hay cosas pequeñas…?”.
Aunque lo diga así, no me importa; me encantan las tareas pequeñas. Eso, por supuesto, es una broma, la verdad no quiero que me encarguen cosas que requieran mucha responsabilidad. Creo que ya tuve suficiente de eso por un tiempo.
Ser representante del comité del festival ya me tenía harto. Para mí, en este momento, tareas simples y puntuales son lo que necesito.
“Hmm, si es así…lo único que puedo pedirte es que vayas a comprar cosas”.
“Entonces, iré de compras. ¿Qué necesitas que compre?”.
Si se trata de ir de compras, puedo hacerlo sin problemas.
De hecho, el hecho de que no tenga que colaborar con nadie lo hace perfecto para mí.
“Entendido. Entonces, te encargo las compras, Kirishima. Pero, como la tienda está bastante lejos de la escuela, te prestaré mi bicicleta. Está estacionada al final del aparcamiento de bicicletas. Pero no la dañes, ¿de acuerdo?”.
Mientras decía eso, Natsuki me entregó la llave.
Acepté de buena gana su amable propuesta y me dirigí a hacer las compras. Y entonces…
“… ¿Eh? ¿Hikawa-sensei?”.
“¿Kirishima-kun?”.
Cuando estaba saliendo por la puerta de la escuela, con la bicicleta a mi lado, me encontré con Hikawa-sensei.
Parecía que Hikawa-sensei estaba planeando salir de la escuela de momento.
Normalmente siempre llevaba un bolso más grande, pero ahora llevaba uno más pequeño. ¿Será que va a alguna tienda de conveniencia cercana?
Por otro lado, Hikawa-sensei me miraba con una expresión desconcertada y dijo.
“…Ah, Kirishima-kun, ¿Venías a la escuela en bicicleta?”.
“No, es que…bueno…se la pedí prestada a Natsuki. Ahora voy al centro comercial para comprar cosas para la clase”.
“Ya veo, Natsuki te la prestó…hmmm”.
Después de parpadear un par de veces, Hikawa-sensei me miró con el rabillo del ojo.
“Eh… ¿Qué pasa?”.
“No es nada. Solo que parecen que son muy cercanos”.
“¡N-No, no es lo que estás pensando!”.
“Si, lo sé. Pero…pues, me da celos”.
Hikawa-sensei, aún en modo profesora, me dio la espalda de repente.
Conociéndola como la conozco, sabía que no estaba realmente enojada. Pero, sinceramente, esa pose era tan adorable que me costaba resistir darle un abrazo. Incluso me daban ganas de hacerla sentir más celosa. Por supuesto, no lo haría, pero las ganas estaban ahí.
“Por cierto, ¿qué haces aquí, Hikawa-sensei?”.
Por curiosidad, le pregunté y Hikawa-sensei cambió de actitud y respondió.
“De hecho, yo también voy de compras. Notamos que faltaban algunas cosas en la sala de profesores, así que iba al centro comercial”.
“Oh, ya veo. Entonces, ¿por qué no vamos ju-”.
Iba a decir que fuéramos juntos, pero me detuve. Después de todo, Hikawa-sensei y yo somos estudiante y profesora. Si otros estudiantes nos vieran juntos, podrían pensar…bueno, quién sabe qué podrían pensar.
Y en ese momento.
De repente, un profesor entró por la puerta de la escuela.
En ese instante en que lo vimos, Hikawa-sensei y yo fingimos no conocernos. No es como si lo hubiéramos planeado, pero ya se había convertido en un hábito.
Y entonces…
El hombre que entró por la puerta nos hizo a ambos soltar un pequeño sonido al mismo tiempo.
Después de todo, ese hombre era…
“Ah, Hikawa-sensei. Buenas tardes. ¿Quizás usted también está yendo de compras?”.
No sé su nombre, pero era el profesor de educación física. Por su tono, parecía que también había ido de compras.
El profesor de educación física se rascó la cabeza con una expresión de preocupación.
“Bueno, resulta que los estudiantes de mi clase me pidieron que los acompañara a ir de compras. Tenía mucho trabajo acumulado, pero como me dijeron que necesitaban a un profesor en quien confiar, no pude negarme. Lo siento, Hikawa-sensei. Usted también va de compras, ¿cierto? Lo siento por detenerla. Bueno, entonces…”.
“S-Si, claro. Bueno, entonces, hasta luego…”.
Hikawa-sensei respondió con torpeza, y el profesor de educación física se fue rápidamente, llamado por sus estudiantes que lo llamaban desde adentro diciendo: “¡Profesor, rápido!”.
Una vez más, quedamos solos frente a la puerta de la escuela.
Pero…creo que ambos estábamos pensando lo mismo.
Mirando hacia otro lado, dije:
“Verás…en realidad, Natsuki me pidió que fuera de compras por algunas cosas, pero hay algunas cosas que no entiendo…”.
“S-Si, eso es un problema. No puedes equivocarte, ¿verdad?”.
“S-Si, así es. Por eso, sería genial contar con una profesora en quien pudiera confiar…”.
“S-Si, claro”.
Al asentir, Hikawa-sensei, mirando hacia otro lado, dijo con voz temblorosa:
“Entonces… ¿quieres que te acompañe? Casualmente, yo también voy al centro comercial”.
“S-Si, claro. Sería mejor no equivocarse, ¿verdad? Así que…”.
Hikawa-sensei me miró de reojo y susurró:
“… ¿Vamos juntos?”.
Por supuesto, no era una propuesta que quisiera rechazar.
Así que, decidimos ir juntos.
“Está muy lejos, ¿no?”.
“…Sí, está muy lejos”.
Hikawa-sensei y yo caminamos hacia el centro comercial, pero parecía que nunca llegábamos. Aunque había seleccionado la ruta más corta en la aplicación de mapas, calculó que tardaríamos unos minutos a pie en llegar. Es cierto, Natsuki me dijo que me prestaría su bicicleta.
Además, el calor del mes de julio era bastante sofocante.
El sol abrasador me hacía sudar sin parar. Al mirar a mi lado, Hikawa-sensei parecía sufrir aún más por el traje que llevaba. Y para colmo, llevaba una chaqueta.
Ya lo había decidido.
“Hikawa-sensei, tengo una propuesta… ¿quieres ir en bicicleta?”.
Tenía la bicicleta que me prestó Natsuki a mi lado ya que no la dejé en la escuela.
Me di cuenta que no necesitaría la bicicleta si iba con Hikawa-sensei, pero bueno, no quise dejarla.
Así que, la traje por si acaso, pero obviamente sería mejor si la usáramos.
Ante mi propuesta, Hikawa-sensei agitó las manos con nerviosismos y dijo:
“B-Bueno, K-Kirishima-kun, puedes irte adelante en la bicicleta. Yo iré caminando despacio…Así que no te preocupes. De hecho, debería haberlo dicho antes”.
“No, no es eso. Es que…quiero decir que…Y… ¿Por qué no vamos los dos juntos en bicicleta?”.
“¡Eh!”.
Cuando hice esa aclaración, Hikawa-sensei se enfadó de repente y puso las manos en su cintura.
“Mira, Kirishima-kun, como sabrás, está prohibido que dos personas vayan en bicicleta. ¡Como profesora no puedo hacer algo así!”.
Hikawa-sensei cruzó los brazos y se giró, mostrando una actitud obstinada.
¡Maldita sea, no funcionó!
Si ambos fuéramos en bicicleta, el calor se sentiría menos.
Hikawa-sensei es muy estricta…
“Mira, Kirishima-kun, vete. No te preocupes por mí”.
Hikawa-sensei trató de despedirme con una suave sonrisa.
Pero, aunque me había dicho que fuéramos juntos, me sentía raro yendo yo solo en bicicleta.
En ese momento, mi teléfono vibró y vi que tenía un nuevo correo electrónico.
Era una notificación de que la reunión del comité comenzaría en una hora. No me había avisado. Probablemente Jono-san convocó la reunión de improvisto.
Sin embargo, siendo el representante, sabía que tenía la obligación de asistir, incluso si me avisaron de imprevisto.
Eché un vistazo rápido a mi lado y vi que Hikawa-sensei también miraba su teléfono con una expresión de disgusto.
Seguramente estaba viendo el mismo correo. Después de todo, Hikawa-sensei también tenía mucho trabajo que hacer.
Desde aquí, regresar a la escuela nos tomaría unos cuantos minutos con un poco de esfuerzo. Así que asistir a la reunión era posible. Sin embargo, si lo hacíamos, surgía un problema.
“… ¿Y qué hacemos con las compras?”.
Si regresamos ahora, ni yo ni Hikawa-sensei podremos hacer las compras.
Hikawa-sensei seguramente no querrá eso. Ella siempre cumple con lo que se le pide. Después de estos últimos meses, lo tengo claro: es ese tipo de personas.
Pero, por casualidad, había una forma de solucionar este problema aquí mismo.
Después de debatir con Hikawa-sensei, tras dudar un poco, finalmente habló con timidez:
“Eh, esto…Kirishima-kun, ¿Podrías no decir esto en la escuela?”.
“¿En serio te preocupas por eso a estas alturas?”.
“¡S-Si, lo sé! ¡Pero, pero sabes a qué me refiero!”,
Con un puchero de disgusto, Hikawa-sensei frunció los labios en señal de desaprobación.
De todas formas, no teníamos mucho tiempo para seguir charlando.
“Entonces, Hikawa-sensei, súbete detrás de mí”.
“D-De acuerdo. Entonces, me subiré”.
Con cautela, Hikawa-sensei se sentó en el portaequipajes de la bicicleta.
“¡Vamos allá! ¡Agárrate fuerte!”.
“¡S-Si!”.
Ante mi declaración, Hikawa-sensei se aferra al portaequipaje de la bicicleta.
Y después de eso, empiezo a pedalear con fuerza, pero…
“¿E-Eh…? ¡Es muy difícil!”.
En los mangas, parece muy fácil, pero no puedo mantener el equilibrio.
Honestamente, no puedo ni avanzar unos pocos metros.
Al verme así, Hikawa-sensei se puso pálida y dijo:
“¿A-Acaso…soy muy pesada…?”.
“¡NOOO! ¡No es eso para nada…!”.
“A-Ayer por la noche comí muchos dulces…solo algunos pocos… ¡Es verdad! ¡De verdad no comí mucho!”.
Hikawa-sensei agitaba las manos frenéticamente para explicarse. No puedo evitar reírme y continué:
“Jajaja. Lo siento Hikawa-sensei. Es tu forma de sentarte, me hace perder el equilibrio. Es más difícil de lo que pensaba”.
“¿E-En serio? Pero en los mangas, la gente se sienta así todo el tiempo”.
“Tal vez si se pueda, pero por ahora no puedo hacerlo”.
Se necesita un gran sentido del equilibrio para poder hacer esto.
Además, con sus piernas extendidas de un solo lado, el peso no está bien distribuido.
“Entonces, ¿Qué hacemos?”.
“Mmmm…Creo que tendrás que sentarte de otra forma o acercarte más a mí…”.
En el momento en que dije eso, Hikawa-sensei cambió de posición y se acercó a mí. Podía sentir algo suave en mi espalda…Eso, probablemente era lo que yo creía que era.
¡Carajo, no puedo concentrarme!
Pero eso no importaba, no podíamos perder más tiempo.
“¡Bueno, Hikawa-sensei, vamos!”.
“S-Sí, va-, ¡Ah!”.
Sin más empecé a pedalear a toda velocidad.
Con cada pedaleada, los pedales se sentían más ligeros y las ruedas giraban más y más.
El viento soplaba en mi cabello mientras pedaleaba con todo lo que tenía por el camino solitario.
Conozco bien este lugar. Por lo que sabía que no había nadie quien nos viera.
“¡K-Kirishima-kun, no vas demasiado rápido? ¡Siento que vas cada vez más rápido!”.
“¡Si no voy así de rápido no llegaremos a tiempo! Y, además, ¡Aquí empieza la bajada!”.
“¡Aaaaaaaaahhhh!”.
Aunque frené con fuerza, la bicicleta comenzó a descender por la colina en un instante.
Por supuesto, estoy siendo cuidadoso. Pero supongo que Hikawa-sensei se dio cuenta de que me dejé llevar un poco, porque al cabo de unos segundos, con el cabello ondeando por el viento, gritó a todo pulmón.
“¡B-Basta, Kirishima-kun! ¡Si sigues así, me enfadaré!”.
“¡Lo siento, HIkawa-sensei!”.
“B-Bueno, está bien…pero…”.
Dicho eso, Hikawa-sensei apoyó todo su peso sobre mi espalda.
Luego, mezclada con el sonido del viento que silbaba en mis oídos, Hikawa-sensei susurró con voz casi inaudible:
“Pero…esto es divertido”.
“Si, así es”, respondí.

En mi mente comencé a divagar sobre una idea absurda que me daba un poco de ilusión.
¿Y si yo y Hikawa-sensei no fuéramos estudiante y profesora? Sé que es una idea imposible.
Pero, de alguna manera, pensé en cómo hubiéramos vivido nuestra juventud juntos si ambos fuéramos estudiantes de preparatoria.